Asombroso hallazgo: una piscina natural fue encontrada a 200 metros de profundidad en una caverna subterránea
"Este estanque estuvo aislado durante cientos de miles de años y nunca había visto luz antes de ese día", explicaron los científicos.
Constantemente se conocen hallazgos sorprendentes de diferentes partes del mundo. En esta ocasión, uno de los más increíbles tuvo lugar en junio de 2020. Se encontró una piscina natural en el Parque Nacional de las Cavernas de Carlsbad, en Nuevo México Estados Unidos.
En las últimas horas la noticia volvió a ser nombrada, ya que aún los científicos no pudieron encontrar respuestas para desentrañar el descubrimiento.
La piscina fue encontrada a 200 metros de profundidad en el parque, durante una expedición a cuevas vírgenes, reconocidas por sus estructuras con formaciones de estalactitas de cera.
"La piscina subterránea, que se encuentra en la cueva Lechuguilla, parece estar completamente prístina", escribió en la página de Facebook del parque nacional el geocientífico Max Wisshak, en referencia a que mantiene inalterado, puro, tal como era en su forma original.
Wisshak , quien dirigió la expedición que encontró el lago en 2020, agregó que el cuerpo de agua estaba bordeado de unas pequeñas estalactitas que quizá se corresponden con lo que los científicos denominan "dedos de piscina".
"Podrían ser colonias bacterianas que han evolucionado sin ninguna presencia humana en absoluto", destacó en 2020 sobre el hallazgo en la publicación que incluyó una fotografía del pequeño lago de agua azul lechosa en un lecho de roca blanca.
Además, como era de esperar al tratarse de especialistas en un parque nacional, señaló en ese momento que tomaron "precauciones especiales para asegurarse de que no se introdujeran contaminantes en estos cuerpos de agua".
"Este estanque estuvo aislado durante cientos de miles de años y nunca había visto luz antes de ese día", explicó Rodney Horrocks, jefe de Recursos Naturales y Culturales del Parque Nacional de las Cavernas de Carlsbad, a medios locales.
Los expertos coinciden en la importancia a la hora de la conservación, clave ya sea por tratarse de un tesoro de la naturaleza como para los estudios. Desde junio de 2020, el acceso a la cueva se limita a los investigadores autorizados a la exploración.