Biólogos argentinos instalaron cámaras de transmisión en vivo a lo largo de las costas de la Patagonia para monitorear y estudiar la llegada al país del pingüino de Magallanes, una especie emblemática que cada año retorna a esta región para iniciar su proceso de nidificación.

Las cámaras de alta definición, con capacidad de emisión continua, se encuentran emplazadas en la Isla Tova, en la provincia de Chubut. Desde allí, de forma remota y sin perturbar a las aves, registran el arribo de los pingüinos y el cuidado de sus pichones en tiempo real, incluyendo durante la noche.

Este proyecto es liderado por el Instituto de Biología de Organismos Marinos del Conicet, a cargo del investigador Flavio Quintana, en colaboración con la Fundación Rewilding Argentina y el Gobierno de Chubut. La transmisión en vivo se puede seguir de forma gratuita a través del canal de YouTube de Rewilding.

LA IMPORTANCIA DEL ESTUDIO

Los pingüinos de Magallanes, al igual que el resto de la vida marina, se ven afectados por la contaminación de los océanos, la pesca de arrastre y la acumulación de plásticos. Por ello, este monitoreo en tiempo real resulta fundamental para que los investigadores puedan observar el comportamiento de estas aves en su hábitat natural y tomar las medidas de conservación necesarias.

La Isla Tova, con 15 kilómetros cuadrados de superficie, es una de las 60 islas e islotes que conforman el Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral, donde habitan unas 50 especies de aves marinas que construyen allí sus nidos y crían a sus pichones.

La Isla Tova, tiene 15 kilómetros cuadrados de superficie. Foto: La Nación

"Los pingüinos de Magallanes, al igual que el resto de la vida silvestre marina, sufren las consecuencias de la contaminación de los océanos, especialmente por la pesca de arrastre y la contaminación plástica. Por ello resulta fundamental estudiarlas y así poder tomar las medidas de conservación necesarias que garanticen su supervivencia", indicó Rewilding en un comunicado.

PINGUINOS CON NOMBRE DE CELEBRIDADES

Las cámaras ya han registrado a los primeros pingüinos que han pisado la remota Isla Tova, que se encuentra deshabitada, lo que dificulta aún más el trabajo de campo llevado a cabo por el equipo del Laboratorio de Ecología de Predadores Tope Marinos (Leptomar).

Este laboratorio ha permitido la recolección de datos a largo plazo sobre la ecología, el comportamiento y la conservación de diversas especies de aves marinas del Mar Argentino. Incluso, algunos de los pingüinos estudiados han recibido nombres de famosas celebridades, como "Taylor Swift", "Messi" o "Dibu Martínez".

Estos nombres surgen del trabajo que realiza la Global Penguin Society (GPS), la fundación que encabeza el científico y conservacionista Pablo García Borboroglu, quien el año pasado fue distinguido con el premio Indianapolis Prize, considerado el Nobel de la Conservación.

Foto: Global Penguin Society

A través del seguimiento con transmisores satelitales, la investigación estudia el comportamiento migratorio de estas aves, que eligen a Chubut como su lugar de hábitat en el mundo. Esto permite trabajar en su conservación y preservación, algo fundamental para que sigan eligiendo esta provincia, con todo lo que conlleva en materia de turismo, ciencia y naturaleza.

CHUBUT, HOGAR DE LA MAYOR POBLACIÓN MUNDIAL DE PINGÜINOS

Chubut alberga más de 30 colonias de pingüinos, cada una con sus propias características e historia. Algunas de ellas, como las Islas Leones y Tova, tienen registros de al menos 150 años de antigüedad, mientras que otras, como la colonia de la Estancia El Pedral, fueron descubiertas hace apenas 15 años.

Según García Borboroglu, la provincia de Chubut es el lugar que alberga la mayor población mundial del pingüino de Magallanes. Incluso, cuenta con las dos colonias más grandes del mundo: San Lorenzo, en Península Valdés, con 204.000 parejas reproductivas; y Punta Tombo, con 139.000 parejas.

Chubut tiene las dos colonias más grandes del mundo. Foto: Gobierno del Chubut

No todas las colonias están abiertas al turismo. Además de Punta Tombo, se puede visitar San Lorenzo, Cabo Dos Bahías, algunas islas próximas, Caleta Valdés y la colonia de la Estancia El Pedral. Cada una de ellas tiene diferentes pautas de manejo y conservación, de acuerdo a sus características.

CONSERVACIÓN Y CONCIENTIZACIÓN 

Para García Borboroglu, la clave está en la conservación y la concientización. "Todos ganamos, porque la naturaleza gana, el turismo gana y la conservación gana", afirma el investigador.

En este sentido, el proyecto de colocación de transmisores satelitales a 20 pingüinos en diversas colonias de Chubut no solo permite obtener información sobre sus rutas migratorias, sino que también se utiliza como herramienta de educación y concientización. Así, la comunidad puede seguir en vivo y en forma online la ruta migratoria de estos animales, conectándose mucho más con ellos.

"A la gente le gustó mucho esta posibilidad de conectarse con un pingüino transmitiendo en vivo en medio del océano durante todo el año. Tenemos gente que en Uruguay seguía a 'Messi' y cuando llegó a la costa, la gente fue a buscarlo a ver si lo veía. A ese nivel estamos", cuenta García Borboroglu.

Para el investigador, es esencial que la gente entienda la importancia de respetar y conservar a estas especies. "No necesitamos tener un guardafauna o un policía al lado para poder respetar a los animales. Tenemos que entender que son animales salvajes", enfatiza.

MÁS LEGISLACIÓN PARA PROTEGER A LOS PINGUINOS 

Chubut ha avanzado mucho en materia de preservación desde el histórico derrame de petróleo de 1991, que visibilizó la problemática. Sin embargo, García Borboroglu considera que aún queda mucho trabajo por hacer, principalmente en lo que respecta a la legislación que protege a estas especies.

"Necesitamos trabajar mucho más en Chubut en la legislación que protege estas especies, porque hoy es insuficiente y esto hace que ponga a estas especies en vulnerabilidad", afirma el investigador.

Además, destaca la importancia de contar con Fiscalías Ambientales donde se puedan denunciar daños al ambiente o a las especies, y que los gestores de las áreas turísticas tengan la capacidad de poner límites y regular la cantidad de visitantes, para proteger tanto el ambiente como la experiencia del turista.

"Para los pingüinos de Magallanes, su hábitat es de fundamental importancia, dadas sus características de vida y su fidelidad a su nido y colonia. Para su ciclo de vida es crucial y por eso hay que cuidar las colonias todo el año, incluso en invierno cuando el pingüino no está", concluye García Borboroglu.

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